Esta primavera, a causa del confinamiento, la mayoría de nosotros hemos pasado menos tiempo al aire libre. Ahora podemos desarrollar más actividades en el exterior: tomar algo en una terraza con familiares y amigos, realizar deporte, pasear, disfrutar de la naturaleza… y este verano, aunque de una forma diferente, también podremos estar en playas y piscinas. Pero ¿está nuestra piel preparada para este cambio?
Al estar en casa la piel también ha podido sufrir los efectos del confinamiento y de estar menos expuesta al sol, como por ejemplo una disminución en la síntesis de vitamina D. Aunque el encierro también puede tener sus ventajas, ya que una menor exposición al sol también reduce el envejecimiento de la piel y evita que salgan manchas.
En verano, en general, hay que prestar más cuidado a la piel porque la exponemos más y los rayos del sol son más intensos. En la mayoría de nosotros, este año el cambio de estación va a suponer una mayor adaptación de nuestra piel que en otras ocasiones. Ahora es el momento comenzar a proteger, preparar y cuidar de la piel para que esté lista para el verano.
Cuidados de la piel en verano
- Protector solar. El uso de una crema de protección solar en verano es indispensable, tanto si vamos a tomar el sol como si salimos a realizar cualquier actividad al aire libre. Cada uno tenemos un tipo de piel y podemos tolerar mejor o peor la exposición al sol. En nuestra Farmacia podemos asesorarte sobre el protector solar más adecuado según tu fototipo de piel y la actividad que vayas a realizar.
- Hidratación. Por dentro y por fuera: ¡toma agua! En verano es importante mantenerse hidratado. Además, las leches y cremas hidratantes después de la ducha también ayudan a mantener la humedad natural de la piel y prevenir su deshidratación.
- Alimentación. Una dieta sana y equilibrada rica en frutas y verduras frescas favorece la hidratación de nuestro cuerpo y piel.
- Tomar el sol de forma controlada. Evita las exposiciones prolongadas al sol, los expertos recomiendan tomar el sol como máximo 30 minutos diarios y siempre utilizando un filtro solar adecuado a tu tipo de piel. No es recomendable tomar el sol en las franjas horarias donde la radiación ultravioleta es más intensa (de 12:00 a 17: 00).
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