La menopausia en las mujeres suele aparecer a partir de los 45 años debido a que los ovarios dejan de producir las hormonas conocidas como estrógenos. Una de las consecuencias que padecen muchas mujeres en esta etapa postmenstrual es la sequedad vaginal, también llamada atrofia vaginal.
Como consecuencia de la falta de estrógenos esta patología produce que las paredes de la vagina se vuelvan más delgadas y se irriten, causando la sequedad.
Según los estudios, alrededor del 90% de los casos de sequedad vaginal son producidos por la menopausia, lo que hace que su conocimiento y los posibles tratamientos sean de vital importancia.
Síntomas
Entre los principales síntomas de sequedad vaginal encontramos:
- Ganas constantes de orinar.
- Ardor al orinar.
- Molestias durante las relaciones sexuales.
- Falta de lubricación durante las relaciones sexuales y leve sangrado tras practicarlas.
- Sensación de picazón y ardor en los genitales.
- Infecciones de orina.
Sean cuales sean los síntomas, lo cierto es que la sequedad vaginal provoca numerosas molestias y malestar entre las mujeres que lo sufren, por lo que es importante estar atenta a las señales y acudir a un profesional para intentar atajarlas lo antes posible.
Consejos para mejorar la sequedad vaginal
Algunos consejos que se pueden seguir para mejorar la atrofia vaginal son:
- Seguir unas pautas de vida saludable, evitando el consumo de tabaco y alcohol.
- Cuidar la higiene íntima con una rutina de limpieza que incluya agua templada y un jabón con ph adecuado.
- Utilizar lubricantes.
- Ciertos medicamentos, que deberán ser recetados por un profesional, pues muchos de ellos pueden tener efectos secundarios adversos.
En cualquier caso, lo mejor es visitar siempre a tu ginecólogo de confianza, si sufres alguno de los síntomas anteriormente descritos, para que pueda ayudarte a mejorar tu situación.
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